19 de abril de 2022

El Día de la Tierra se celebra en todo el mundo el 22 de abril. Creada en 1970, en los Estados Unidos, la fecha es una oportunidad para crear conciencia sobre la importancia de la conservación y preservación del medio ambiente y discutir acciones sostenibles en el mundo.

Con el rápido crecimiento de la población mundial, la adopción de prácticas sostenibles en la producción de alimentos se ha vuelto indispensable. Y cuando se trata de sostenibilidad, Brasil ha cumplido su papel y ha demostrado resultados positivos en el sector agrícola.

La fruticultura, por ejemplo, se ha destacado en los últimos años por el uso de tecnologías para ganancias de productividad y sustentabilidad, asegurando productos frescos y sabrosos y ofreciendo más calidad de vida a las personas.

Entre las diversas prácticas agrícolas, las más comunes son el manejo de la cobertura y fertilidad del suelo, el uso consciente de los sistemas de riego, el seguimiento y control de plagas y enfermedades, la fertirrigación, la intercalación de frutos con otros cultivos menores. y la trazabilidad, que monitoriza todo el proceso productivo.

Las iniciativas sostenibles en la fruticultura brasileña tienden a aumentar las exportaciones, ya que la producción de alimentos combinada con la protección del medio ambiente se ha convertido en un requisito de los clientes externos. En general, los consumidores internacionales están dispuestos a pagar más por una fruta tropical que se ha producido de acuerdo con los estándares de sostenibilidad.

Para el Director Internacional de la Asociación Brasileña de Productores y Exportadores de Frutas y Derivados (Abrafrutas), Luiz Eduardo Rafaelli, la producción sostenible de frutas en el país, especialmente para la exportación, es una realidad.

“Hoy, el 85% de la fruta brasileña se exporta a Europa y eso obligó al productor rural a adaptarse a los estándares de calidad y responsabilidad social y ambiental que exigen los compradores europeos”.

Luiz Eduardo también es director de Be Fruit, empresa que produce y exporta productos tropicales, como naranjas, limones, aguacates y jengibre. Según él, la empresa lleva varios años adoptando iniciativas sostenibles en el día a día de la producción.

“Trabajamos con el uso racional de la energía y el agua, hacemos el reciclaje de basura y empaques y manejo sustentable en las huertas. En mi finca usamos trampas para insectos para reducir el uso de pesticidas”, dijo.

Todas estas prácticas le han valido a Be Fruit certificaciones y referencias reconocidas internacionalmente, como el sello socioambiental Rainforest y el sello de seguridad alimentaria Global GAP. más exigente”, explicó Rafaelli.

Para los productores brasileños, la sostenibilidad no se trata solo de introducir iniciativas ambientales en el campo, sino también de proteger y utilizar los recursos naturales de manera responsable, asegurando un futuro mejor para el planeta Tierra.